Izquierda Marxista

Revuelta por el lavado de cara del informe Hutton

Autor: Chris Harman

Fecha: 29/1/2004

Traductor: Alejandra Ríos

Fuente: Socialist Worker - Suplemento

Suplemento Especial

· Hay que protestar contra las mentiras de la guerra

· Hay que apoyar a los trabajadores de la BBC – no a los chivos expiatorios

· Blair es el que tiene que renunciar


Estamos presenciado el mayor encubrimiento de la clase política de nuestros tiempos

Un año atrás Tony Blair repetía sin cesar que en Irak había armas de destrucción masiva que podían detonar en 45 minutos. Hoy en día todo el mundo sabe que no hay armas de destrucción masiva, excepto por miles de cabezas nucleares en posesión del mismo Bush.

Monitoreos independientes de la información transmitida por la BBC, muestran que el 80% de la información de la BBC ‘aceptaba’ esta mentira, aunque la mitad de la población se oponía a la guerra.

Pero Hutton ha decretado que no se debe adjudicar ninguna parte de culpa a Blair y su gobierno. Hutton ha cumplido al pie de la letra lo que Blair le dijo que hiciera cuando lo nombró.

Gavyn Davies, el presidente de la junta de directores de la BBC, y Greg Dyke, el director general de la BBC, eran viejos compinches de Blair. Pero a ellos les parecía que de alguna manera tenía que expresarse lo que la mayoría de la gente opinaba sobre la guerra.

Pero el informe de Hutton fue demasiado para los maestros de la máquina de mentiras. Entonces se vieron obligados a renunciar. En este momento hay una caza de brujas en la corporación contra la minoría de los periodistas y comentaristas en la BBC que dijeron la verdad.

Desde Londres hasta Glasgow, cientos de trabajadores de la BBC abandonaron sus tareas en señal de protesta. Todo el mundo tiene que darles su apoyo.

Un 56% de las personas en una encuesta publicada en el periódico Evening Standard dice que el veredicto de Hutton es equivocado. La mitad dice que el informe es un “lavado de cara”.

Estos sentimientos tienen que transformarse en acción.

No hay otra forma de impedir que Blair transforme la BBC en una completa máquina de mentiras para su propio beneficio y el de su maestro en la Casa Blanca. No hay otra forma de defender aunque sea el más mínimo derecho de la libertad de palabra y de opinión en la televisión y radio que la protesta.

Los sindicatos que representan a los trabajadores de la BBC tienen que llamar a la huelga para defender a cada uno de los periodistas y comentaristas amenazados por la caza de brujas. Los otros sindicatos deben estar a su lado, y decir que ellos también van a realizar acciones por la defensa de nuestras libertades.

El jueves, cientos de trabajadores de la casa central de la BBC abandonaron sus tareas, uno de ellos le dijo a Socialist Worker: “La gente cree que es el principio de muchos males. Vamos en camino de tener los medios de comunicación controlados por el estado. Se siente en el aire un olor a totalitarismo. La investigación de Hutton fue un lavado de cara. El gobierno se ha salido impune luego de haber mentido.”

La CND (Campaña por el Desarme Nuclear) y la Coalición contra la guerra Stop the War han llamado a una demostración frente a la residencia de gobierno para el sábado 31 de Enero de 2004.