Latinoamérica

Ecuador: ¿A qué juega Lucio?

Autor: Editorial

Fecha: 18/3/2004

Fuente: Revista Vistazo

En aspectos claves de economía y política, el presidente Gutiérrez tiene jugadas que en la mayoría de veces no se entienden hacia dónde van. ¿Lances de un neófito o golpes de efecto de un Maquiavelo disfrazado?

Sociedad Patriótica
Como un golpe de espectacularidad el presidente Lucio Gutiérrez anunció que dejará la Presidencia de su partido y que lo mismo deberán hacer los ministros que pertenezcan al Comité Ejecutivo Nacional CEN. La movida se presentó como una forma de dejar de lado todas las críticas del poder del partido al interior del Gobierno y de esa manera avanzar en una apertura hacia otros grupos políticos y consolidar el poder. Cuando en reemplazo suyo se eligió a su hermano Gilmar, todo parecía una jugada en banda: el benjamín de los Gutiérrez es considerado el diputado más cercano al todopoderoso Partido Social Cristiano y al mismo tiempo se dejaba todo a la familia. De paso, se bajó el perfil de los polémicos (y criticados por el diputado León Febres-Cordero) cuñado presidencial Napoleón Villa y del primo Renán Borbúa. Pero la jugada parece llegar tarde, cuando el socialcristianismo comienza a soltar las amarras de una alianza que creció desde los primeros días del Gobierno. ¿Una jugada perdida por extemporánea?

Los ministros del cambio
Como una manera de rectificar y ampliar su base política, Lucio Gutiérrez nombró nuevos ministros, de los más diversos orígenes políticos y con reconocida trayectoria, en algunos puestos claves. Esta era la jugada que le permitía asociar su imagen a la de un gobernante capaz de rectificar y entrar, en cierta medida, en el traje del estadista. Pero la movida, luego de algunos meses no parece concretarse. La mayoría de recién llegados, sobre todo los que están en el área política –Raúl Baca, Yolanda Torres, Xavier Ledesma– no parecen cuajar en las fórmulas ya establecidas del Gobierno, y su presencia no ha traído grandes cambios. El nepotismo y la sinrazón de las decisiones políticas están a la orden del día. Sus voces se han opacado, porque sus moldes no han sido respetados, y la cadencia de la familia continúa reinando. La jugada cayó en el vacío.


El acercamiento al PRE
¿Para qué? Sus dirigentes aseguran que el gran objetivo del PRE es el regreso de Abdalá Bucaram y que esa sería la gran apuesta por la que ellos colaborarían con el Gobierno. Sin embargo, hasta el momento el Presidente no encuentra la fórmula viable para esta enorme inversión política, si no deshace la Corte Suprema de Justicia. Por lo que la alianza sobre este tema cae en un diálogo de sordos. Sin embargo, las concesiones de algunos sectores claves de la economía en manos roldosistas, el nombramiento de una embajadadora, la salida del Ministro de Vivienda, y la polémica entrada de Víctor Hugo Sicouret, cuestionado por ser deudor de la banca cerrada, en el Gobierno dejan más de una duda sobre el objetivo único del PRE. Mientras tanto, los voceros del roldosismo no saben si entran o salen de la alianza, aunque Jacobo Bucaram Pulley habla de las buenas intenciones del Presidente. ¿Una jugada de alianzas por carambola con el PRE y el PSC? ¿O la suma desesperada de contrarios que en la baratija de ofertas servirán para aprobar las reformas políticas, la nueva bandera juguete del régimen?


Petróleos y Petroecuador
A pesar de las críticas, al ministro de Energía, Carlos Arboleda, nadie lo mueve. Como para congraciarse con todos sus censores, entre ellos el PSC, el Presidente le puso la tarea de descubrir en un tiempo límite el origen del robo de petróleo en el poliducto. Y dio otro giro de espectacularidad: destituyó de su cargo a todos los vicepresidentes de Petroecuador y declaró la emergencia en el sector. El anuncio siguiente es aún más desconcertante: esas vacantes serán reemplazadas por un tribunal sin rostro que elegirá a los nuevos funcionarios. Otra jugada: se eliminó el piso del 35 por ciento de beneficio para el Estado que se fijaba para las compañías que participen en la licitación petrolera. Al parecer el Presidente está haciendo correctivos a latigazos a la política de Arboleda. De esta manera, el Ministro sigue su camino, fijado desde SP, pero se da una imagen de imparcialidad. La apuesta: atenuar los rumores de que todo favorece a las compañías de la China Popular. Hacia ¿dónde pateará este penal Gutiérrez?


Las aduanas
El presidente Gutiérrez pidió a la directora del SRI, Elsa de Mena, que llamara a una licitación internacional para contratar nuevas verificadoras en las Aduanas. "Los requisitos deben ser más estrictos porque no estamos conformes con el trabajo de las actuales verificadoras", dijo el Mandatario. En su criterio las actuales verificadoras que trabajan en las Aduanas subfacturan las mercancías y son cómplices de robos e irregularidades. Una jugada anunciada. En la reunión de noviembre pasado del directorio de la Corporación Aduanera Ecuatoriana (CAE), el mayor Fernando del Pozo, delegado de Lucio Gutiérrez, aseguró que por orden presidencial se llamaría a una nueva licitación. Un paso que se venía cocinando desde que Gutiérrez llegó al poder. El 16 de enero de 2003, un día después de la posesión presidencial, un grupo de manifestantes en una marcha pacífica en Guayaquil pidió el cambio en el control aduanero y la eliminación de las verificadoras. Entre otras cosas afirmaban que era una fuente importante de empleo para los ecuatorianos. Desde entonces se han dado mil formas de críticas a las verificadoras. ¿A quién quiere beneficiar? A pesar de todas las críticas y deficiencias a estas empresas, las cámaras de la producción aceptan que han puesto un cierto control. ¿Cómo planea entrar al TLC con unas aduanas que son cada vez menos transparentes, cuando el principio básico del libre comercio es un funcionamiento impecable de las aduanas?