Torturas, Insurgencia y la ausencia de un plan

17/05 - Buscando una salida honorable

 

Autor: Editorial

Fecha: 17/5/2004

Traductor: Isidoro, especial para PI

Fuente: The Economist


Al tiempo que los insurgentes matan a otro miembro del Concejo de Gobierno Iraquí, George Bush y Tony Blair están ambos presionados para enviar más tropas y presentar un plan claro de cómo saldrán de Irak
Los militantes que combaten la ocupación de Irak conducida por América golpearon nuevamente el lunes 17 de Mayo, con un coche bomba en los cuarteles generales de la coalición en Bagdad que mató a Izzedin Salim, portador de la presidencia rotativa del Concejo de Gobierno Iraquí. Salim, un líder musulmán chiíta, iba en el último auto de un convoy que esperaba entrar en la Zona Verde - el recinto fuertemente vigilado de la coalición - cuando explotó la bomba. Es la segunda vez que los insurgentes matan a un miembro de la administración interina de Irak: en Septiembre pasado, asesinaron a Aqila al-Hashemi, una de las tres mujeres que América había designado para el Concejo.
Este último golpe contra los intentos de la coalición por restaurar el orden en Irak sigue a varios días de feroz combate entre las tropas de la coalición y los militantes chiítas leales a Muqtada al-Sadr, un clérigo radical. El viernes, por primera vez, tanques americanos ingresaron a tierra sagrada en la ciudad santa chiíta de Najaf, para abrir fuego sobre militantes escondidos entre antiguas tumbas. Y el domingo, ataques de los hombres de Sadr en Nasiriya forzaron a tropas italianas a retirarse del centro de la ciudad a sus bases en los suburbios.
Con menos de una semana de tiempo antes de que los ocupantes conducidos por los americanos deban entregar la soberanía de vuelta a un gobierno provisional iraquí, está claro que se necesitan más tropas de la coalición para detener a la insurgencia hacia una mayor escalada y a arrastra a Irak hacia la guerra civil abierta. De hecho, tanto América como Gran Bretaña están, según se informa, preparándose para traer refuerzos - en el caso de América, se informó el lunes que miles de sus tropas estacionadas en Corea del Sur serían redesplegadas en Irak. Pero, especialmente luego de las revelaciones sobre el abuso a prisioneros iraquíes por parte de soldados de la coalición, tanto el Presidente George Bush como el primer ministro británico, Tony Blair, están bajo creciente presión, tanto de sus votantes en casa como de sus aliados extranjeros, para ofrecer una estrategia clara de cómo y cuando retirarán a sus soldados de Irak.
El lunes, la prensa británica citó a agentes anónimos del gobierno diciendo que el primer ministro y el presidente estaban trabajando para acelerar la salida de las fuerzas de la coalición acelerando el paso del reclutamiento y entrenamiento de las reformadas fuerzas de seguridad iraquíes. Destacados miembros de ambas administraciones han estado diciendo públicamente en los días recientes que sacarían a sus tropas fuera de Irak si el nuevo gobierno soberano que asuma el 1 de Julio se los pidiera. Sin embargo, también han dicho que no esperan que esto suceda. Adnan Pachachi, un miembro dirigente del Concejo de Gobierno, dijo el fin de semana que hasta que las fuerzas iraquíes estén capacitadas para combatir a al-Qaeda y a otros grupos terroristas que operan en el país, todavía necesitarían ayuda de fuera. El secretario de estado de Bush, Colin Powell, dijo que esperaba que el nuevo gobierno iraquí esté de acuerdo en poner sus fuerzas bajo comando americano desde el 1 de Julio.
Todo esto aparece mientras el escándalo sobre el maltrato de prisioneros iraquíes continúa extendiéndose, minando las bases de la legitimidad de la ocupación conducida por los americanos. El domingo, el Pentágono buscó refutar un informe en la revista New Yorker de que el abuso era resultado de un plan secreto, aprobado por el secretario de defensa, Donald Rumsfeld, para endurecer los métodos de interrogación utilizados con los detenidos. La revista citó a un ex agente de inteligencia anónimo diciendo que las reglas del plan secreto de interrogación eran: "Agarren a quien deban. Hagan lo que quieran." El Pentágono insistió en que ninguno de sus jefes había aprobado ningún programa que pudiera haber alentado semejantes abusos.
Bush hasta ahora ha rechazado llamados para que despida a Rumsfeld pero las horrorosas fotos de soldados americanos abusando de iraquíes le han hecho perder apoyo en casa y en el exterior. El fin de semana, seis estados pro americanos del golfo publicaron una fuerte condena al tratamiento de prisioneros de la coalición. Quizás inmediatamente más preocupante para Bush es el efecto que el escándalo del abuso de prisioneros y la continuidad de la insurgencia están teniendo sobre sus posibilidades de reelección en Noviembre. Una encuesta de Newsweek del fin de semana mostraba la aprobación del trabajo del presidente hundiéndose en la apreciación más baja hasta ahora de 42%. Más de la mitad de los americanos desaprueba ahora el manejo de Bush de la guerra de Irak.
La crisis en Irak también está poniendo el trabajo de Blair en serio riesgo. Especulaciones de que el primer ministro está contemplando renunciar han sido alimentadas por su segundo, John Prescott, quien admitió en el Times de Londres del sábado que los principales ministros ya estaban discutiendo un cambio de liderazgo. Una encuesta de YouGov de ese mismo día mostraba que el 46% del público británico quiere ahora que Blair renuncie antes de la próxima elección, que se espera para dentro de un año, mientras que sólo el 20% lo quiere un período más en el cargo. Hubo, no obstante, un poco de buenas noticias para el almenado premier el fin de semana: los propietarios del Daily Mirror despidieron al editor del periódico, Piers Morgan, y admitieron que las fotos que había publicado, de soldados británicos supuestamente abusando de prisioneros iraquíes, eran falsas, como había insistido el gobierno.
Con todo, la capitulación del Daily Mirror no hará que los problemas de Blair desaparezcan. Tanto Amnistía Internacional como el Comité Internacional de la Cruz Roja han dicho que expresaron preocupación a las autoridades británicas un mes atrás sobre el tratamiento a los detenidos. El gobierno dice que, de 33 alegatos de maltrato por las fuerzas británicas que han sido investigados, hasta ahora seis podrían conducir a que se levanten cargos contra soldados. Se espera que la creciente inquietud pública sobre Irak resulte en fuertes pérdidas para el Partido Laborista de Blair en las elecciones municipales y al Parlamento Europeo del 10 de Junio.
Mientras crece la insatisfacción pública con el manejo que han hecho los líderes de la coalición de Irak, y como la moral está minada por los alegatos de abuso a prisioneros y la firme alza de las bajas, Bush y Blair estarán tentados a buscar una salida lo más rápida y lo menos dolorosa posible. Pero ambos se jactan de ser hombres de principios, y a ninguno de los dos le gustaría entrar en la historia como un desertor. El problema es, mantener el rumbo requerirá más que sólo sostenerse firmes: implicará enviar aún más tropas para sufrir las bombas y balas de los insurgentes, y quizás hasta dejarlas allí por varios largos e inconfortables años.

Publicado el 17 de Mayo, 2004


     
 

 

   
  La Fracción Trotskista está conformada por el PTS (Partido de Trabajadores por el Socialismo) de Argentina, la LTS (Liga de Trabajadores por el Socialismo) de México, la LOR-CI (Liga Obrera Revolucionaria por la Cuarta Internacional) de Bolivia, LER-QI (Liga Estrategia Revolucionaria) de Brasil, Clase contra Clase de Chile y FT Europa. Para contactarse con nosotros, hágalo al siguiente e-mail: ft@ft.org.ar