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El presidente de Irak, Sadam Husein, fue traicionado por tres oficiales de alto rango con quienes tenía lazos de parentesco y por un ministro, que facilitaron datos sobre su paradero y ordenaron que no hubiera resistencia cuando las tropas estadounidenses entraban a Bagdad, según ex responsables del depuesto régimen iraquí actualmente en el exilio, según informa AFP.
"El jefe de la Guardia Republicana, Maher Sufian al Takriti, que seguía a Sadam Husein como su sombra, ordenó a sus tropas que no combatieran cuando las fuerzas norteamericanas entraron a Bagdad el 8 de abril", precisó a AFP uno de esos responsables, que pidió el anonimato.
"Esa orden verbal fue confirmada por el jefe de los servicios de inteligencia, Taher Jalil al Harbuch al Takriti, y por un oficial, Hussein Rachid al Takriti, cuyo hijo era director de la oficina de Qussai Sadam Husein", hijo menor del mandatario y jefe de la Guardia Republicana, agregó la fuente.
Además, un ministro con una cartera política hizo correr el rumor de que Sadam Husein había muerto en el bombardeo de al Mansur, el 7 de abril.
Ese ministro y sus familiares fueron evacuados posteriormente por las fuerzas estadounidenses, y ahora viven en un país europeo", aseguró el ex responsable en el exilio, que se negó a precisar la identidad de ese miembro del gobierno de Sadam.
Los tres oficiales al Takriti y sus familiares "también fueron evacuados por un avión militar estadounidense" después de la caída de Bagdad, sostuvo la fuente.
Según otros ex funcionarios iraquíes, Sadam Huseim y su hijo Qussai se mostraron el 8 de abril rodeados por la multitud en el barrio al Aazimiyeh de Bagdad. En esa ocasión, el todavía jefe de Estado "dijo que lo traicionaron, en referencia a los bombardeos norteamericanos contra su persona", en lugares donde debía estar presente, dijo uno de los ex funcionarios que participó en ese mitin.
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